lunes, 20 de noviembre de 2006

EL ORIGEN DEL CONFLICTO PALESTINO-ISRAELI: INTRODUCCION

Judíos por la Justicia en el Oriente Próximo
Znet (2002)
Mientras continúa el habitual derramamiento de sangre en el Oriente Próximo, la búsqueda de una solución equitativa se debe ocupar de las causas fundamentales del conflicto. La doctrina convencional es que, aunque ambos lados tienen la culpa, los palestinos son "terroristas" irracionales que no tienen un punto de vista que valga la pena escuchar. Nuestra posición, por el contrario, es que los palestinos tienen un motivo real para sentirse víctimas de una injusticia: se les arrebató su patria de más de mil años, sin su consentimiento y en general por la fuerza, cuando se creó el estado de Israel. Y todos los crímenes siguientes - por ambos lados- son la consecuencia inevitable de esta injusticia original.
Este trabajo bosqueja la historia de Palestina para mostrar cómo ocurrió este proceso y cuál sería una solución moral a los problemas de la región. Si a usted le importan los pueblos del Oriente Próximo, judíos y árabes, debería leer este informe sobre el otro lado de la historia.
Introducción
La posición sionista es que llegaron a Palestina a fines del siglo 19 para reivindicar su patria ancestral. Los judíos compraron tierras y comenzaron a construir allí una comunidad judía. Enfrentaron una oposición crecientemente violenta de los palestinos árabes, presumiblemente causada por su antisemitismo inherente. Los sionistas entonces se vieron obligados a defenderse y, en una forma u otra, la misma situación continua hasta hoy.
El problema que presenta esta explicación es que es simplemente falsa como lo mostrará la evidencia documentada contenida en este trabajo. La realidad de lo que ocurrió es que el movimiento sionista, desde el comienzo, buscaba el desposeimiento prácticamente total de la población árabe indígena de manera que Israel pudiera ser un estado totalmente judío, o llegar lo más cerca posible de este objetivo. La tierra comprada por el Fondo Nacional Judío fue conservada en nombre del pueblo judío y no debía ser jamás vendida o siquiera arrendada a los árabes (una situación que continúa en la actualidad.)
La comunidad árabe, a tomar crecientemente conciencia de las intenciones sionistas, se opuso vigorosamente al aumento de la inmigración y de las compras de tierra judías, porque presentaban un peligro real e inminente para la existencia misma de la sociedad árabe en Palestina. A causa de esta oposición, todo el proyecto sionista jamás se hubiera podido realizar sin el respaldo militar de los británicos. La amplia mayoría de la población de Palestina, a propósito, había sido árabe desde el siglo siete dC. (Más de 1200 años.)
En resumen, el sionismo se basaba en una visión errónea, colonialista, del mundo en la que no importaban los derechos de los habitantes indígenas. La oposición de los árabes al sionismo no estaba basada en el antisemitismo, sino en un temor totalmente razonable de desposeimiento de su pueblo.
Otro punto: siendo nosotros mismos judíos, la posición que presentamos aquí es crítica del sionismo, pero de ninguna manera antisemita. No creemos que los judíos hayan actuado peor que lo que cualquier otro grupo hubiera hecho en su situación. Los sionistas (que eran una clara minoría del pueblo judío hasta después de la Segunda Guerra Mundial) tenían un deseo comprensible de establecer un sitio en el que los judíos fueran los amos de su propia suerte, considerando la funesta historia de opresión de los judíos. Especialmente cuando el peligro para los judíos europeos cristalizó a fines de los años 30 y más tarde, las acciones de los sionistas fueron impulsadas por una real desesperación.
Pero lo mismo sucedió con las acciones de los árabes. El mítico "país sin un pueblo para un pueblo sin país" ya era el hogar de 700.000 palestinos en 1919. Esta es, como veremos, la raíz del problema

1 comentario:

Anónimo dijo...

Creo que ya es hora de que el "pueblo palestino" (que se constituye y unifica como tal en realidad a raiz del problema con Israel) llegue a algún tipo de autocrítica en algún momento de su historia. Sería de especial relevancia que al menos un sector mínimo de la intelectualidad palestina (algunos de los que viven en un ambiente de libertad y paz en paises europeos como Francia o España) fueran capaces de reconocer los graves errores cometidos a lo largo de estas décadas por parte de sus, muchas veces, poco cordiales e inteligentes líderes, como sí encontramos en el otro "bando" (que terrible tener que hablar de bandos, cuando en realidad el origen del pueblo hebreo es el mismo que el del árabe) Son muy conocidas las asociaciones internacionales e israelies judías por la paz, del otro lado, cuesta mucho encontrar algún tipo de voz que disienta de sus líderes ideológicos. El sinionismo no nació con el holocausto, como ustedes afirman o dicen que afirman los judíos israelíes, fue una corriente que nace mucho antes, de hecho, es un concepto que se le ocurre a Hertz al quedar impresionado por el antisemitismo francés que afloró tras el caso Dreyfuss. Como cuenta el novelista Amos Oz (recientemente distiguido con el premio Príncipe de Asturias, y activista de una ong por la paz en Israel) cuando su padre emigró a Palestina tras el holocausto pudo leer en las paredes de su ciudad europea natal "¡judíos marchaos a Palestina!" Muchos años más tarde, ya fundado el estado de Israel, volvió a su ciudad y encontró en las paredes graffitis con un lema bien distinto, y en el fondo igual al primero "¡judíos, salid de palestina!" En el fondo, ni Europa, ni el mundo árabe le reconocen a este maravilloso pueblo que tanto ha aportado a la historia de la humanidad, ningún legitimidad en su presencia en ningún sitio. Si eres judío, en el fondo, no se te permite ser alemán, a secas, eres judío alemán, o judío francés, ni iraní, sirio o egipcio a secas (que los hay y muchos) sino siempre acompañados del estigma "judío". Pero la presencia de este pueblo era algo conocido desde siempre en la región bajo dominación turca durante siglos (no existió nunca un estado palestino, es aun más artificial que el hebreo, porque de hecho, este si existio siglos atrás) querer negar esta realidad histórica sólo habla de una intención partidista de analizar la realidad del conflicto (lo que es lo mismo que no tener un ímpetu por solucionarlo) No vale desde Europa o Estados Unidos hablar de los judío israelíes como personas profundamente equivocadas con un tono paternalista, hay que ir allí y ver qué se cuece, cómo es vivir con el miedo en el cuerpo frente a un sector de población hostil que crece a una velocidad cuatro veces mayor que la tuya, mientras todos los países que te rodean declaran su intención de acabar con tu existencia de una vez por todas. Normalmente, en todas las creaciones de estados se cometen injusticias, pero este, el de Israel, es el primer conflicto post creación de un estado que se perpetua a lo largo de sesenta años. Aunque puedan ser justas las reclamaciones de muchos palestinos ¿Son razonables dentro del marco de la realidad que se vive en Oriente Próximo? ¿No resultaría más productivo llegar a la convicción de que les es imposible obtener todo el territorio que reclaman y simplemente tratar desde la paz de avanzar? ¿No vivirían en un estado de normalidad mucho más productivo para la sociedad arabe israelí en su conjunto y su crecimiento, si sus intentos y alianzas con el resto de países árabes por acabar con el estado de Israel hubiesen llegado a su fin en la primera guerra que perdieron de forma catastrófica? ¿Donde estaríamos ahora si desde hace cuarenta años el pueblo palestino se hubiese negado a apoyar a instituciones como Hamas (mafias bien organizadas a las que les interesa tan poco el fin del conflicto como a las autoridades políticas israelíes)? Creo muy acertada la frase que proclamaría en su momento Golda Meir: "El conflicto se acabará cuando ellos quieran más a sus hijos de lo que nos odian a nosotros" Creo honestamente que hay una gran parte de verdad en esto. A nadie hoy día se le ocurriría mantener un conflicto abierto con EEUU, porqué Palestina lo mantiene desde hace décadas con la potencia militar de la zona es una de las grandes incógnitas de la historia política de la humanidad. España vio nacer la democracia gracias a la generosidad del silencio de mucha gente que había sufrido las represalias del franquismo pero entendió que aun más importante que obtener justicia inmediata por errores cometidos en el pasado, era mirar a un futuro en paz, un futuro no ya para ellos, si no para sus hijos y nietos. Falta "vista" entre los palestinos, y es cierto que las malas acciones del estado de israel ha movido mucha mala sangre entre esta población, pero, repito ¿donde está la cordura de los intelectuales palestinos que viven en europa, lejos del clima de guerra que se vive allí? Hay que reclamar justicia por los robos de propiedades y tierras a los palestinos, pero no olvidar que muchos de estos se produjeron tras el avance de Israel despues de haber sido invadido por todos los estados árabes que les rodean. Quien se mete en una guerra voluntariamente debe aceptar las consecuencias de su resolución, lo contrario es un acto de cinismo. Por otro lado, es cierto que se han cometido abusos israelíes y estos deben ser reparados prontamente. Hoy por hoy lo más urgente es la paz, y en principio la paz no es posible si las aspiraciones palestinas son parte de Jerusalem. No entro en si es justo o no, sólo en que no va a producirse nunca porque eso supone un peligro real para la población israelí. Al pueblo de israel le falta clemencia, paciencia y confianza en sus vecinos, al palestino le sobra cinismo y victimismo. Ojalá se acabe el conflicto algún día. D_os lo quiera.