PARTICIPACION MASIVA EN LA BICI-CRITICA DE CADIZ

Participación masiva en la Bici-critica de Cádiz celebrada en la tarde del jueves 2 de agosto.

A grito de ¡¡Carri-bici ya!! l@s ciclistas recorrieron las carreteras de la ciudad acompañados por la policía local que impedió la buena circulación de la masa ciclista y segregaba el grueso de la concentración.

Grupo de Acción Social (Para Kaos en la Red)

En la tarde del 2 de agosto 150 personas se concentraban en la Plz. de San Juan de Dios para reivindicar un carril-bici seguro y real en la ciudad de Cádiz.

Ayer, jueves 2 de agosto a las 19:00 de la tarde se encontraba la Plaza San Juan de Dios abarrotada por l@s 150 ciclistas que se disponían a recorrer la ciuadad de Cádiz para reivinidcar un carril-bici real y digno para tod@s aquell@s que utilizan la bicicleta como medio de transporte. La heterogeneidad de l@s participantes reflejaba el caracter transversal que contiene las reivindicaciones de la Asamblea Ciclista de la Bahía de Cádiz.

El recorrido se inició, como es habitual, desde la Plaza de San Juan de Dios , justo enfrente del Ayuntamiento, para así continuar por las puertas de tierra que desemboca en la avenida principal de la ciudad. Seguidamente el grueso de la marcha ciclista decidió ir por el paseo marítimo par así socializar el mensaje que se viene dando desde el cominzo de la marcha: ¡¡Arriba, abajo los coches la carajo!!

Mientras, la policía local interrupía la concentración obligandola a parar cuando un semáforo en rojo se interponía durante el grueso de la marcha, asi mismo, recogió los datos de dos ciclistas que participaban en la bici-crítica.

El recorrido terminó a las 21:00 despues de haber transpasado toda la avenida principal de la ciudad y el paseo marítimo (en la playa) de ésta misma.

Cada vez más, esta acción ciudadana va adquiriendo una mayor repercusión en la población, la reivindicaciones sociales y ecológicas que la asamblea ciclista de la Bahía de Cádiz propugna, poco a poco, van calando en la ciudadanía.

La próxima asamblea será el martes a las 19:00 a las afueras de la catedral de la ciudad.

La asamblea ciclista nos invinta todos los jueves primeros de cada mes a las 19:00 en la Plaza de San Juan de Dios en Cádiz, a reivindicar un carril-bici seguro y real para tod@s aquellos que utilicen la bicileta.

A continuación las sugerencias al PGOU presentados por la Asamblea Ciclista al Ay-untamiento de Cádiz

ASAMBLEA CICLISTA BAHÍA DE CÁDIZ.
SUGERENCIAS AL AVANCE DEL PGOU.

Introducción.

La bicicleta es un medio de transporte que a la fecha no tiene un lugar seguro para transitar en la ciudad de Cádiz. Pero se está volviendo una gran opción para las personas que están hartas de tener que pasar dentro de su automóvil gran parte de su vida, teniendo que soportar los embotellamientos y la histeria de las demás personas.

Un automóvil genera del 20% al 25% de los bióxidos de carbono que se acumulan en la estratosfera, incrementando el efecto invernadero y el cambio climático, con consecuencias catastróficas e imprevisibles a medio plazo. Los contaminantes, al elevarse a la atmósfera y combinarse con la humedad, provocan la lluvia ácida, generando daños severos en los bosques, lagos y suelos, dañando la vida salvaje y deteriorando edificios.

La bicicleta es el medio de transporte más civilizado de todos, dado que no contamina, no ocupa mucho lugar, no hace las ciudades peligrosas, es el complemento ideal al transporte público, mejora la salud de quién pedalea, evita la dependencia energética de nuestro país con los inestables países productores de petróleo y evita que se provoquen guerras por petróleo que tantas muertes han provocado en Irak. Países como Holanda y Alemania cuentan con una infraestructura potente para que los ciclistas puedan circular con seguridad, y ciudades como Sevilla y Barcelona entre otras, ya han implementado obras importantes de infraestructura que permite a los y las ciclistas trasladarse de un lado a otro sin poner en riesgo su vida.

El uso de la bicicleta es una alternativa a los problemas cotidianos de movilidad y contaminación en la ciudad de Cádiz, ciudad que por sus características sería perfecta para la movilidad en bicicleta. Pero necesitamos acabar con el mito de que las bicicletas son para recreo o deporte y no para transportarse. La razón por la que no se utilizan de manera generalizada (Esto que da patente en ciudades que ya cuentan con la infraestructura) es por que sin una infraestructura adecuada, trasladarse en bicicleta no es seguro y no todas las personas pueden permitirse cada día, por su salud o su agilidad, estar expuestas al tráfico que no las respeta.

Si las personas tuvieran la opción de usar la bicicleta con una infraestructura mínima que protegiera a los ciclistas del peligro de los vehículos, se incrementaría su uso, no únicamente como una actividad recreativa, sino como un medio de transporte alternativo, eficiente, económico, rápido y no contaminante, cuyo requerimiento de obra pública es insignificante. No se trata de crear un carril apartado de la ciudad reservado para que la gente pasee los domingos. Se trata de una red de vías seguras, alternas que permitan a las personas trasladarse en bicicleta por la ciudad: Los carriles-bici.

Los carriles-bici son espacios reservados exclusivamente para el tránsito seguro de bicicletas a un lado de las calles, sujetos a una normativa y bien señalizados, no puestos con baldosas rojas a lo largo de una acera, esto molesta a quién pasea y además no se puede saber en los cruces quién tiene la preferencia.

La existencia y uso del carril-bici permite desarrollar el concepto de la bicicleta como un medio de transporte alternativo, el cual se presenta como solución concreta y factible a los problemas de contaminación ambiental y atascos, que no se solucionan abriendo lugares por los que entren más coches como el puente (en el que nos preguntamos si tendrá cabida la bicicleta o si tendremos que seguir utilizando el arcén con riesgo de nuestras vidas). Las y los ciclistas también debemos ser tomados en cuenta.

Planteamientos en el Avance del PGOU expuestos a exposición pública.

El Plan Intermodal de Transportes mencionado en el documento contemplaba la construcción del segundo puente a Cádiz sólo después de que se hubieran llevado a cabo una serie de medidas disuasorias del uso del coche. Entre ellas el desdoblamiento de la vía férrea que aún no se ha llevado a cabo. No nos explicamos como han procedido a la construcción del puente sin que se hayan llevado a cabo estas medidas disuasorias que pretendían reducir el uso del coche al 50% en comparación al transporte público. Ahora el tercer acceso implica fomentar masivamente el uso del transporte privado, ya que ni siquiera se contempla en el proyecto una línea ferroviaria en el mismo, a pesar de ser una medida mucho más necesaria y efectiva para la Bahía de Cádiz desde el punto de vista de la movilidad urbana. Echamos en falta en el documento una valoración pormenorizada del número de coches que va a atraer el segundo puente y de la capacidad de acogida de la ciudad de los mismos.

En el PGOU las únicas medidas planteadas en el documento de "Transporte y Movilidad" se refieran al encauzamiento de los coches en el entramado urbano y a los esfuerzos por absorber la masiva afluencia de coches que va a provocar la no planificada construcción del tercer acceso a Cádiz. En lo que se refiere al fomento del uso de la bicicleta el documento plantea lo siguiente:

Apuesta por el carril-bici lúdico en las zonas donde se pueda. Descarta el carril-bici funcional ya que genera conflictos con el tráfico rodado. Descarta el carril-bici por el paseo marítimo ya que "hay muy poco espacio en algunas zonas del paseo y en la carretera supondría suprimir 350 aparcamientos". Dice que hay que evitar cruces innecesarios entre ciclistas y coches ya que puede provocar accidentes como ya ha ocurrido en Málaga y Torrox.

Consideramos este desprecio a la bicicleta un grave error de planificación urbana en una ciudad cuyas características topográficas y climáticas la hacen ideal para el uso de este tipo de transporte limpio y justo en la ciudad. Tomar como ejemplo ciudades malagueñas para evaluar las consecuencias de la bicicleta en una ciudad es un planteamiento bastante limitado. Invitamos a los redactores del Plan a analizar ciudades como Ámsterdam o, sin ir muy lejos, San Sebastián. Los conflictos que genera la presencia de coches y bicis en el entramado urbano son superables como se ha demostrado en multitud de ciudades de diferentes características. Si los técnicos o políticos encargados de planificar la coexistencia de ambos tipos de vehículos son incapaces de resolver la situación que busquen asesoramiento externo. En todo caso la apuesta debe ser penalizar el coche y fomentar el uso de la bici, planteamientos diametralmente opuestos a lo expuesto en este avance del PGOU.

En todo caso, recordamos que la alcaldesa de Cádiz justo antes de las elecciones anunció un ambicioso plan sobre la bicicleta que choca frontalmente con lo planteado en el documento. Esperemos que la palabra de la alcaldesa prevalezca y la aprobación inicial del PGOU incluya una apuesta seria por la bicicleta. En caso contrario, o los responsables del PGOU redactan el documento ajenos totalmente a los designios de la alcaldesa o Teófila Martínez mintió descaradamente a los gaditanos en la campaña electoral.

Además hay que tener en cuenta que el Consorcio de Transportes Bahía de Cádiz prepara la redacción de un Plan de la bicicleta para el ámbito de la Bahía de Cádiz. Un plan que el Ayuntamiento de Cádiz debe tener en cuenta, por lo que en la redacción del PGOU deberían participar también los redactores y técnicos del Consorcio de Transportes, del que el Ayuntamiento forma parte también con el resto de Ayuntamientos de la Bahía. En definitiva, la apuesta por la bicicleta debe ser mucho más seria y ambiciosa en el documento que lo que se ha planteado en el avance.

Propuestas generales sobre movilidad urbana para la ciudad de Cádiz.

Priorización en el uso de la vía. El espacio urbano destinado a movilidad es limitado. Esto es una realidad en cualquier ciudad pero adquiere una especial relevancia en la ciudad de Cádiz. Por tanto, debe establecerse un reparto entre los diferentes modos y usuario de la vía. El papel de la política de movilidad es hacer un reparto adecuado de ese espacio, otorgando prioridad de uso a los medios públicos y a los modos sostenibles. Es decir, las vías públicas deben estar destinadas prioritariamente a los servicios públicos y al peatón, el transporte colectivo y la bicicleta. La situación actual en la ciudad de Cádiz es que la prioridad establecida es la inversa: el automóvil privado tiene prioridad de uso de la mayor del espacio de circulación frente a un porcentaje marginal destinado al peatón y la inexistencia total de espacio destinado al transporte colectivo y la bicicleta. El objetivo de un PGOU del siglo XXI debe ser invertir esa situación.

La bicicleta como instrumento. Una priorización de los modos sostenibles en el uso de la vía implica, entre otras cosas, que las infraestructuras que éstos requieran deben hacerse a costa del espacio actualmente destinado a modos no prioritarios ni sostenibles, es decir, a costa del espacio destinado actualmente al automóvil privado. Optar por las aceras-bici como modelo generalizado de vías ciclistas supone que el espacio para la bici se introduce a costa de otro usuario prioritario, el peatón, y no supone un avance hacia una movilidad sostenible sino todo lo contrario. Supone la renuncia institucional a limitar el uso del automóvil en la ciudad y los perjuicios que éste produce. Supone poner en conflicto a los modos de movilidad sostenible, en este caso el peatón y la bicicleta. Y supone, además, renunciar a emplear la bicicleta como instrumento eficaz para reducir el espacio destinado al automóvil privado y para calmar el tráfico en la ciudad. Por tanto, la propuesta municipal basada de forma generalizada en aceras-bici puede calificarse, desde el punto de vista de la movilidad sostenible, como ineficaz y desperdiciadora de oportunidades.

La bicicleta como objetivo. Planificar el fomento de la bicicleta en la ciudad a través de la facilitación de espacios de circulación adecuados supone partir del hecho de que las bicicletas circulan por todas partes y no por unas espacios determinados habilitados para ello. Es decir, el usuario de la bici se desplaza de un punto cualquiera a otro de la ciudad, con la ventaja, frente a los modos motorizados, de que la bici le permite hacer un desplazamiento puerta a puerta. La conclusión importante es que, dentro de la ciudad, todas las calles son en la práctica vías ciclistas y deben ser consideradas como tales en cualquier planificación. La pregunta a responder no es, por tanto, por qué vías urbanas van a circular las bicis sino en qué vías urbanas es necesario habilitar espacios protegidos para la circulación de bicicletas u otras infraestructuras (pasos, semáforos…). Y la respuesta es que en todas las vías urbanas en las que la intensidad del tráfico motorizado dificulte o ponga en riesgo a los usuarios de la bici. De forma genérica, ésas son las grandes vías de circulación (avenidas) y las que limitan grandes manzanas. La determinación de la solución de adaptación de cada vía a la circulación de bicicletas requiere un estudio pormenorizado, que debe hacerse a través de una planificación adecuada y los proyectos que la desarrollen.

Como criterio general para las vías principales, el espacio para la bici (en este caso carril-bici) debe obtenerse eliminando las líneas de aparcamiento. Esta medida, además, favorecería la fluidez del tráfico y haría más competitivo al transporte colectivo.

Como criterio general para el centro y otras áreas de trama urbana muy densa, hay que establecer dos tipos de vías: las exclusivamente peatonales y las compartidas para peatones y bicis. Los vehículos motorizados en el centro deben estar limitados a carga y descarga, servicios públicos (limpieza, sanitarios, seguridad…), taxis y usuarios de garajes, sólo con acceso directo a éstos. Las vías de circulación compartida para peatones y bicicletas no requieren ningún tipo de infraestructura viaria específica, salvo la señalización y/o barreras que impidan el tráfico motorizado.

Dejar de fomentar el automóvil privado. Lejos de que el ciudadano esté ganando espacio público, en la ciudad de Cádiz lo sigue perdiendo en detrimento del automóvil privado. Y esto debido tanto al aumento de motorización y uso del automóvil como a la respuesta institucional de asumir dicho fenómeno. La primera medida, por tanto, hacia una movilidad sostenible es dejar de hacer, paralizar las actuaciones públicas destinadas a favorecer el automóvil (pérdida de espacios peatonales, más aparcamientos en superficie y subterráneo, mejora de los accesos para automóviles a la ciudad, nuevas vías de penetración de automóviles al centro urbano…).

Propuesta de red de red de carriles-bici para la ciudad de Cádiz.

La red de carriles-bici que proponemos a continuación debe iniciarse incluso antes de al aprobación definitiva del PGOU y con un periodo de ejecución completa no superior a cuatro años. Todos los grandes proyectos de la ciudad se están enfocando de cara al bicentenario. La red de carriles-bici, a pesar de ser relativamente sencillo en ejecución, no puede plantearse para diez años.

Por otra parte, hay que evitar por todos los medios que la construcción de carriles-bici suponga una disminución del espacio para los peatones y un conflicto con los mismos al forzar el uso conjunto de una misma vía. El espacio debe ser ganado a los coches. Esta debe ser la línea para humanizar las ciudades. El fomento del uso de la bici pasa ineludiblemente por la penalización del uso del coche para hacer la ciudad de Cádiz más habitable.

Red de carriles:

Puertas de Tierra - Cortadura. Por paseo marítimo. Debe aprovecharse el paseo marítimo suprimiendo los aparcamientos que fuesen necesarios para la construcción del carril-bici. Puertas de Tierra – Cortadura. Por la avenida principal. La arteria principal de la ciudad debe tener carril-bici aunque deban suprimirse todos los aparcamientos. Circunvalación Casco Antiguo. De nuevo evitar la supresión de aceras. Los primeros sacrificados deben ser los aparcamientos. Debe cubrir todo el perímetro del casco y estar conectado con Plaza de Sevilla y el carril-bici del paseo que conecta en Puertas de Tierra. Glorieta Zona Franca - Glorieta Parque bomberos.

Implica la remodelación completa y supresión del actual carril-bici de la Avda. Juan Carlos I para hacer uno nuevo que cumpla con unos mínimos de condiciones técnicas y de seguridad. Puente José León de Carranza - Nacional 443 – Cortadura. Asegura la conexión de la red de carriles-bici con Puerto Real. Plaza Lebón - Glorieta Avda. Guadalete. Por la Avenida del Guadalquivir. Debe evitarse la ocupación de la acera lo máximo posible en su ejecución. Glorieta Avenida Guadalete – Alcalde Blázquez. Aumento de conexiones entre la Avenida de la Bahía y Juan Carlos I. Catamarán - Puntales. La plaza de Sevilla, como centro neurálgico de intermodalidad de la ciudad, debe estar bien conectado con los tres carriles-bici que cruzarían longitudinalmente la ciudad. Parking Loreto - Complejo El Cano. Esta actuación debe realizarse lo más rápido posible pues en la actualidad existen aparcamientos para bicicletas en el Complejo y sin embargo es extremadamente peligroso llegar y salir en bicicleta del mismo. La situación puede que acabe en desgracia si no se remedia rápidamente y no sería la primera vez. Avenida de la Bahía – Avenida Almircalbarca. Su ejecución se supedita a la de la nueva Avenida de la Constitución. Alcalde Blázquez - Parking de Loreto. Por la Avda. de Valencia. C/ Sirenas – C. N. Alcázar. Conexión entre Puntales y la Victoria. Avenida Guadalete – Avenida Marconi. Conexión transversal con las tres grandes vías ciclistas que cruzarían longitudinalmente la ciudad. Avenida de Portugal. Conexión transversal con las tres grandes vías ciclistas que cruzarían longitudinalmente la ciudad.
Conexiones vías ciclistas a otros municipios.

Es necesario implementar todas las medidas necesarias desde el Ayuntamiento de Cádiz para que el mismo día que se inaugure el tercer acceso a Cádiz, se inaugure también un carril-bici en el Puente Carranza que una Cádiz con Puerto Real. Ya que a partir de ese día habrá nueve carriles para vehículos motorizados entre ambas ciudades y ni uno sólo para las bicicletas. De modo que una vez que el nuevo puente traslade el problema de la movilidad en la Bahía de la entrada al interior de Cádiz, los coches podrán prescindir de un carril en el puente Carranza sin entrar en conflicto con las bicicletas. Ya que a partir de entonces el problema se producirá dentro de la ciudad por saturación de coches y falta de aparcamientos y no en los accesos. El Ayuntamiento debe negociar con el resto de administraciones, Junta, Ministerio y Ayuntamiento de Puerto Real, lo antes posible la puesta en marcha de este futuro carril-bici.

Por otra parte, la conexión con San Fernando ya cuenta con una vía ciclista pero que no está habilitada en condiciones para el uso de la bicicleta. Lo que le concierne al Ayuntamiento de Cádiz es conectar de forma eficiente está vía con la red de carriles-bici planteada anteriormente para la ciudad.

Apuntar en cuanto al casco Antiguo, que se deben llevar a cabo medidas que garanticen que las calles peatonales lo sean realmente. Los ciudadanos de Cádiz asisten diariamente a la invasión por parte de vehículos motorizados, sobre todos motos de baja cilindrada, en las calles que se han peatonalizado. Ya sean barreras físicas efectivas o mayor vigilancia ya que parece que la policía Local está más pendiente de vigilar que no se beba en las calles que de garantizar la seguridad de los viandantes. Por otra parte el proceso de peatonalización progresiva del casco se ve frenada en el avance del PGOU, la apuesta debe ser más ambiciosa.

Para más información escribe a :

bicicleterosdecadiz@gmail.com
GAS www.grupodeaccionsocial.net